lunes, 16 de abril de 2012

EL ALCALDE DE SANTIAGO DIMITE TRAS SU IMPUTACIÓN POR PRESUNTO DELITO FISCAL


GALICIA | Venta de unas viviendas
Conde Roa insiste en su inocencia y asegura que se marcha 'sin ninguna presión'
Dice que seguirá luchando por su 'inocencia'
Critica a otros regidores gallegos imputados por no seguir su ejemplo
Insiste en que la decisión de marcharse ha sido suya
Afirma que iniciará un nuevo proyecto 'desde cero'

Efe | Santiago de Compostela

El alcalde de Santiago de Compostela, el 'popular' Gerardo Conde Roa, se ha convertido en el primer alcalde de una de las grandes ciudades gallegas en presentar su dimisión por motivos judiciales. Una decisión que se produce cuando aún no ha cumplido un año en el cargo y tras su imputación formal en un juicio por fraude fiscal.

"Me voy sin rencor y sin daño, aunque lucharé por acreditar mi inocencia", subrayó este lunes el regidor compostelano en una multitudinaria rueda de prensa en la que anunció su dimisión.

De esta forma, dijo, tendrá las manos libres para centrarse en la defensa de una causa que lo juzgará por no abonar a Hacienda 291.000 euros del IVA de la venta, en 2010, de 61 viviendas a través de la promotora inmobiliaria Gestlander, de la que es administrador único.

Conde Roa anunció su dimisión dos semanas después de haberse conocido la apertura de investigaciones por parte del juzgado número dos de Santiago de Compostela por fraude fiscal y tras producirse, este mismo lunes, la apertura de juicio oral contra él.

Una decisión que viene precedida de una reunión celebrada este domingo en la sede regional del PPdeG y en la que participaron todos los ediles del PPdeG de Compostela, el propio Conde Roa y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

En ese encuentro se decidió su salida del gobierno y su sucesión en el cargo por el primer teniente de alcalde y concejal de Educación y Cultura, Angel Currás, hombre de la confianza del dimisionario.

A pesar de que fuentes de la dirección del PPdeG consultadas por ELMUNDO.es han subrayado que la Ejecutiva del PP de Galicia y el propio Núñez Feijóo eran partidarios de la dimisión de Conde Roa desde el momento de conocerse su imputación, el regidor precisó este lunes que su decisón "fue libre" y "sin ninguna presión" de su partido o de su grupo municipal.

Decisión 'suya'
"Precisamente me marcho hoy porque los tiempos los he marcado yo. La decisión no la tomaron otros o terceros", dijo en alusión a su partido o al propio Núñez Feijóo y, tras conocer este lunes, la apertura de juicio contra él.

"Un político no puede jugar en dos campos diferentes; como cargo público y en el ámbito judicial", dijo para justificar, dos semanas después, su dimisión. "Ahora quiero centrarme en la defensa de una imputación que he conocido hoy", apuntó al confirmar, nuevamente, que es "inocente" y que recurrirá la decisión judicial.

Además de las razones políticas, Conde Roa esgrimió razones de tipo personal y sentimental en su decisión. "Me voy con el cariño de mi familia y para no perjudicar a mi partido", señaló al tiempo que no ocultó que los ciudadanos tienen que conocer que ha sido imputado "pero no por el desempeño de un cargo público", como alcalde.

"Mi vida pública está limpia en ese sentido", señaló. "Otros se van con la maleta llena cuando salen y no es mi caso porque yo salgo sin ningún tipo de beneficio personal", indicó.

Críticas a Orozco
En este punto, el regidor compostelano se refirió, aunque sin dar nombres, a otro alcalde gallego, en este caso el socialista Xosé Clemente López Orozco, alcalde de Lugo e implicado en la Operación Campeón. "Hay otros que están en la misma situación que yo y no comparecieron ni ante un juez ni ante los medios de comunicación", criticó. "Pero cada uno con su conciencia", añadió.

Sobre su futuro, Conde Roa avanzó que empezará "de cero" un "nuevo proyecto profesional" porque "unas veces se está encima y otras abajo". Así, dijo sentirse como un escalador que ha coronado varios picos de 8.000 metros. "Yo he iniciado la ascensión a un nuevo ocho mil", afirmó al anunciar que se desvinculará "completamente" del Ayuntamiento.

Y es que el aún alcalde compostelano matizó que, tras presentar este mismo lunes por la mañana su dimisión, se irá del cargo cuando se celebre el pleno extraordinario en el que se elegirá a su sucesor y que se celebrará, "si puede ser este mismo martes". "Quiero estar presente como edil para elegir a mi sustituto", señaló.

Afectado por la crisis
"La crisis se lleva al alcalde", apuntaba irónicamente un cargo 'popular' este domingo tras la reunión que mantuvieron los ediles compostelanos, el propio Conde Roa y la cúpula del PPdeG. Y es que, precisamente, los problemas económicos derivados de la crisis inmobiliaria están detrás de su imputación judicial.

Conde Roa se metió en el negocio inmobiliario a comienzos de la pasada década y continuó en Gestlander, una promotora inmobiliaria de la que es administrador único, y que ha construído viviendas en Galicia y en otras comunidades como Castilla-La Mancha o Madrid.

Es a partir de 2008 cuando las deudas comienzan a acosarlo. Él mismo admite que perdió unos cuatro millones de euros en dos de sus últimas promociones inmobiliarias. Aparece con reiteración en las listas de morosos por impago de tasas e impuestos municipales, tanto en ayuntamientos gobernados por el PSOE como por el PP, en la Seguridad Social y en la  

Agencia Tributaria.
Su sueldo es embargado tras separarse de su primera mujer, que le reclama una deuda por el pago de la pensión que cifra en 400.000 euros. Unas acusaciones que tampoco ha negado y que recordó este mismo lunes al subrayar que se va del Ayuntamiento "sin ningún tipo de beneficio".

Precisamente, de los 3.300 euros netos que cobra como alcalde, tan sólo le quedaban 1.000. "Lo mío es muy sencillo, no tengo ni coche, se lo traspasé todo a mi mujer a raíz de mi separación", declaraba a principios del 2008, cuando el Concello compostelano creó el registro de bienes de los concejales y en medio de la polémica por el impago de 7.314 euros del IBI de una promoción de Geslander en esta ciudad.

Finalmente, los problemas económicos derivados de su actividade empresarial e inmobiliaria lo han llevado también a la dimisión como regidor. Una aspiración que ha perseguido desde 1986, cuando se presentó por primera vez como candidato del PP a la Alcaldía de Compostela.

Repetiría como candidato en el 2007 y, finalmente, en mayo de 2011. Era su última oportunidad y consiguió la mayoría absoluta, aunque por estrecho margen. Se convertía en el primer alcalde 'popular' de la capital gallega. Pero, su alegría no le ha durado ni un año.

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