Dormirán, incomunicados, en un hotel
Durante la deliberación no pueden leer prensa ni contactar con su familia
El jurado pasará la noche aislado en un hotel al no alcanzar el veredicto
Así se repetirá cada día hasta que lleguen a un acuerdo
Rodrigo Terrasa | Valencia
El veredicto contra Francisco Camps y Ricardo Costa está en marcha. El magistrado presidente de la sala, el juez Juan Climent, ha hecho entrega este lunes al jurado popular del objeto del veredicto, el cuestionario sobre los hechos que tendrán que debatir y responder para determinar si los acusados son o no culpables.
Las primeras horas de deliberación, sin embargo, no han deparado un acuerdo definitivo. Por tanto, los miembros del tribunal popular pasarán la noche en un céntrico hotel de la ciudad aislados e incomunicados. Por la mañana, regresarán al Tribunal Superior de Justicia de Valencia, donde continuarán con las consultas.
Tras cinco horas de discusión entre las partes para dar por cerrado dicho cuestionario, el juez ha hecho entrega de las preguntas en audiencia pública a los seis hombres y tres mujeres que deben alcanzar una resolución.
Climent les ha pedido, tal y como exige el Código Penal, "independencia, responsabilidad y sumisión a la ley", les ha exigido que sólo tengan en cuenta lo que han oído en la durante las últimas seis semanas y luego les ha recordado las normas que deben seguir.
La deliberación del jurado es secreta y su contenido no puede revelarse ni durante las discusiones ni con posterioridad. Los nueve miembros del jurado estarán absolutamente incomunicados hasta que alcancen un veredicto. No pueden comunicarse con el exterior, no podrán tener acceso a los medios de comunicación, no tendrán teléfonos móviles, ni podrán hablar con nadie que no sea compañero del tribunal.
Sólo podrán contactar con su familia o su empresa de trabajo a través de una petición expresa al secretario judicial.
Aislados en el TSJ deberán responder a cada una de las preguntas sobre los hechos. Cada párrafo va marcado como "favorable" o "no favorable". Si el hecho es favorable a los acusados requerirá al menos cinco votos a favor para ser aprobado. Si les perjudica, se exigirán siete votos a favor.
Ningún miembro del grupo puede abstenerse en ninguno de los puntos, bajo amenaza de multa e incluso penas mayores. Y en todos ellos deben ponerse de acuerdo hasta acordar si los acusados son o no culpables. El juez les ha recordado que las respuestas al objeto del veredicto deben ser coherentes y no se admitirán conclusiones contradictorias. Podrán para ellos consultar todo el acta del juicio, así como todas las pruebas, informes y grabaciones que se han escuchado durante el proceso, salvo las que el juez no haya admitido previamente.
"La declaración de culpabilidad o no culpabilidad debe ser congruente y consecuente con los hechos probados anteriormente", ha advertido Climent, que ha admitido su intento por ser "lo más sencillo posible".
Los nueve miembros del jurado responderán nominalmente, en voz alta y por orden alfabético. Si no se ponen de acuerdo antes de las siete de la tarde, serán recluidos en un céntrico hotel de Valencia, donde la Conselleria de Justicia les pagará el alojamiento y la comida. Así se repetirá cada día hasta que lleguen a un acuerdo.
Climent les ha recordado lo que están juzgado. A los dos acusados se les acusa de recibir regalos en consideración a su cargo, el de presidente de la Generalitat, en el caso de Francisco Camps, y el de diputado de las Cortes Valencianas, en el caso de Ricardo Costa.
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