ESPAÑACrisis en los servicios de Inteligencia
Arriba, foto con Alberto Saiz, en el centro vestido de negro, con un pez espada, en julio de 2008.
Abajo, la foto manipulada, en la que la cabeza de un agente sustituye a la de Saiz. | EL MUNDO
Abajo, la foto manipulada, en la que la cabeza de un agente sustituye a la de Saiz. | EL MUNDO
* La dimisión se produce dos meses después de que el Gobierno le renovara
* El general Félix Sanz Roldán le sustituirá al frente de los servicios secretos
* Un militar volverá a dirigir la Inteligencia española ocho años después
El director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz, ha presentado su dimisión, dos meses después de haber sido renovado en el cargo. El general Félix Sanz Roldán, ex Jemad -Jefe del Estado Mayor de la Defensa-, sustituirá a Saiz al frente de los servicios de Inteligencia españoles. La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha sido quien ha propuesto este nombramiento que se hará oficial mañana en el Consejo de Ministros.
La dimisión de Saiz, adelantada por La Sexta, se produce después de la polémica suscitada por las denuncias de varios agentes y directivos del CNI que, según desveló durante varios días EL MUNDO, le acusaban de utilizar los medios de los servicios de Inteligencia para beneficio propio, así como de contratar a familiares y amigos.
En un comunicado remitido por el CNI, Saiz explica que ha decidido presentar su dimisión para evitar "un posible deterioro" del CNI y que pueda resultar perjudicada "la imagen del Gobierno", al que asegura que ha servido "lealmente". Saiz apunta que ha tomado esta decisión después de un "proceso de reflexión sereno y profundo" y al margen del "desgaste personal sufrido debido a la campaña mediática dirigida contra su honor y su prestigio personal y profesional". El hasta ahora director del centro aprovecha para reiterar la "falsedad" de las acusaciones.
Según denunciaron varios miembros del CNI, Saiz utilizó al menos en seis ocasiones dinero público del Centro Nacional de Inteligencia para satisfacer sus aficiones deportivas, cazar y pescar. También le acusaron de contratar a un grupo de personas con las que le unen lazos familiares o de amistad.
Alberto Saiz negó esas acusaciones en sendas comparecencias parlamentarias, una ante la Comisión de Defensa, el pasado 20 de mayo, y otra ante la Comisión de secretos Oficiales, el pasado 24 de junio. Las explicaciones no convencieron al PP que en las últimas semanas ha seguido pidiendo aclaraciones al Gobierno sobre este asunto. La ministra de Defensa decidió abrir una investigación sobre este caso.
A pesar de que lo ha mantenido en el cargo mientras la polémica crecía, el Gobierno ha evitado dar un respaldo contundente a Alberto Saiz. José Luis Rodríguez Zapatero hizo el pasado día 23 unas declaraciones muy lejanas al apoyo explícito: "El director del CNI tiene mi confianza mientras esté en el cargo".
Renovado hace dos meses
El pasado mes de abril el Gobierno decidió renovar el mandato de Saiz al frente del CNI, cinco años después de acceder al cargo. Una decisión que despertó discrepancias dentro del propio Ejecutivo. En ese momento los escándalos por las denuncias contra Saiz ya se conocían.
Antes de que se conociera el nombramiento del general Félix Sanz Roldán para hacerse cargo de los servicios de Inteligencia, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestó que "lo importante es que su sucesor sea competente y conocedor de los temas que debe tratar".
En una rueda de prensa tras la inauguración del Centro Unificado de Seguridad de la localidad madrileña de Alcorcón, Rubalcaba respondía así a las preguntas de los periodistas sobre la posibilidad de que el nuevo director del CNI fuera un militar.
El portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, comentó sobre Félix Sanz Roldán que es "un militar profesional prestigioso" y que siempre ejerció el cargo "con una competencia y profesionalidad absolutamente reconocidas". En su opinión, el ex Jemad "ofrece a España las máximas garantías para dirigir el CNI". "Es un nombramiento muy acertado", concluyó.
Alberto Saiz, ingeniero agrónomo de profesión sucedió al frente del CNI al diplomático Jorge Dezcallar, el primer civil que se hizo cargo de los servicios de Inteligencia españoles, justo cuando pasaron a llamarse CNI en lugar de CESID en 2001, durante el Gobierno de José María Aznar. Anteriormente ocuparon el cargo los generales Javier Calderón, Félix Miranda y Emilio Alonso Manglano.
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La dimisión de Saiz, adelantada por La Sexta, se produce después de la polémica suscitada por las denuncias de varios agentes y directivos del CNI que, según desveló durante varios días EL MUNDO, le acusaban de utilizar los medios de los servicios de Inteligencia para beneficio propio, así como de contratar a familiares y amigos.
En un comunicado remitido por el CNI, Saiz explica que ha decidido presentar su dimisión para evitar "un posible deterioro" del CNI y que pueda resultar perjudicada "la imagen del Gobierno", al que asegura que ha servido "lealmente". Saiz apunta que ha tomado esta decisión después de un "proceso de reflexión sereno y profundo" y al margen del "desgaste personal sufrido debido a la campaña mediática dirigida contra su honor y su prestigio personal y profesional". El hasta ahora director del centro aprovecha para reiterar la "falsedad" de las acusaciones.
Según denunciaron varios miembros del CNI, Saiz utilizó al menos en seis ocasiones dinero público del Centro Nacional de Inteligencia para satisfacer sus aficiones deportivas, cazar y pescar. También le acusaron de contratar a un grupo de personas con las que le unen lazos familiares o de amistad.
Alberto Saiz negó esas acusaciones en sendas comparecencias parlamentarias, una ante la Comisión de Defensa, el pasado 20 de mayo, y otra ante la Comisión de secretos Oficiales, el pasado 24 de junio. Las explicaciones no convencieron al PP que en las últimas semanas ha seguido pidiendo aclaraciones al Gobierno sobre este asunto. La ministra de Defensa decidió abrir una investigación sobre este caso.
A pesar de que lo ha mantenido en el cargo mientras la polémica crecía, el Gobierno ha evitado dar un respaldo contundente a Alberto Saiz. José Luis Rodríguez Zapatero hizo el pasado día 23 unas declaraciones muy lejanas al apoyo explícito: "El director del CNI tiene mi confianza mientras esté en el cargo".
Renovado hace dos meses
El pasado mes de abril el Gobierno decidió renovar el mandato de Saiz al frente del CNI, cinco años después de acceder al cargo. Una decisión que despertó discrepancias dentro del propio Ejecutivo. En ese momento los escándalos por las denuncias contra Saiz ya se conocían.
Antes de que se conociera el nombramiento del general Félix Sanz Roldán para hacerse cargo de los servicios de Inteligencia, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestó que "lo importante es que su sucesor sea competente y conocedor de los temas que debe tratar".
En una rueda de prensa tras la inauguración del Centro Unificado de Seguridad de la localidad madrileña de Alcorcón, Rubalcaba respondía así a las preguntas de los periodistas sobre la posibilidad de que el nuevo director del CNI fuera un militar.
El portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, comentó sobre Félix Sanz Roldán que es "un militar profesional prestigioso" y que siempre ejerció el cargo "con una competencia y profesionalidad absolutamente reconocidas". En su opinión, el ex Jemad "ofrece a España las máximas garantías para dirigir el CNI". "Es un nombramiento muy acertado", concluyó.
Alberto Saiz, ingeniero agrónomo de profesión sucedió al frente del CNI al diplomático Jorge Dezcallar, el primer civil que se hizo cargo de los servicios de Inteligencia españoles, justo cuando pasaron a llamarse CNI en lugar de CESID en 2001, durante el Gobierno de José María Aznar. Anteriormente ocuparon el cargo los generales Javier Calderón, Félix Miranda y Emilio Alonso Manglano.
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