Grabaciones, facturas, pinchazos telefónicos y las declaraciones del sastre lo vinculan con la Operación Gürtel
La implicación de Francisco Camps en la trama de corrupción de la Operación Gürtel ha sido, sin duda, una de las que más ha molestado al PP, cuya dirección nacional no deja de buscar argumentos para avalar su inocencia. El peor parado ha sido, quizás, José Tomás, el director de ventas primero de Milano y luego de Forever Young, las tiendas donde supuestamente las empresas de la trama de Francisco Correa habrían pagado los trajes para el president. Federico Trillo ha acusado al sastre, que perdió su trabajo dos días después de declarar ante Garzón, de mentir y ha dudado de su cualidad profesional. Sin embargo, las pruebas que obran en poder del magistrado dejan clara la vinculación de Camps con las empresas imputadas en el caso.
Grabaciones, pinchazos telefónicos, facturas y las declaraciones del sastre José Tomás son las pruebas que maneja el juez Baltasar Garzón y que demuestran las vinculaciones del presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, con las empresas de Francisco Correa, el principal imputado en la Operación Gürtel. El diario El País recuerda en su edición de hoy como, pese al empeño que los populares están poniendo para restar importancia a la implicación del jefe del PP valenciano -incluso han llegado a denunciar al sastre José Tomás-, Camps cerró contratos con las empresas de la trama y su nombre aparece en diversas declaraciones de personas citadas por el juez.
Pruebas que implican a Camps
Buscando salvaguardar la inocencia del dirigente valenciano, Federico Trillo, responsable de Justicia del PP, arremetió contra José Tomás, el encargado de ventas de Milano y Forever Young, las firmas en las que las empresas de Correa habría comprado los trajes para Camps. Trillo, que negó que conociera al sastre, advirtió que éste miente sobre sus relaciones con el president, sin embargo, hay numerosas pruebas que demuestran lo contrario.
Grabaciones telefónicas
Al margen de las grabaciones telefónicas en las que una de las subordinadas de Correa, Isabel Jordán, aseguraba haber pagado personalmente una factura de 30.000 euros en trajes para Camps (una afirmación que la investigación apuntó como basada en datos reales), otro de los imputados en el caso, Álvaro Pérez El Bigotes, dejó claro a través de los pinchazos telefónicos que ha investigado Garzón que hacía gestiones, algunas de ellas privadas, para el presidente valenciano y también para su número dos, Ricardo Costa.
Facturas
Por otra parte, Garzón tiene en su poder documentos de empresas vinculadas a la trama y de las mencionadas tiendas de moda que dan una visión de los pagos efectuados. Existen, por un lado, pagos por parte de Orange Market (la filial valenciana de la trama) en Milano en 2006 de vestuario para Camps. También hay pagos en Forever Young de ropa del president y de otros cargos vinculados con la trama como Pablo Crespo, Álvaro Pérez, Ricardo Costa, Pedro García y Rafael Betoret.
Pedidos para Camps
Estos últimos pagos, que oscilan entre los 3.200 y los 6.700 euros por persona, fueron abonados por transferencias bancarias y cheques procedentes de Servimadrid y Diseño Asimétrico, ambas dependientes del conglomerado de empresas de Correa. Entre las facturas, de los meses de junio y julio de 2007, figuran algunas notas de pedidos a favor del propio Camps.
El sastre confirmó las compras
Además, Tomás explicó ante el juez, y después lo ha hecho en varias ocasiones en la prensa, cómo Camps fue el destinatario de compras en 2008 pagadas por Orange Market mediante transferencias o incluso en efectivo. En declaraciones a la prensa, Tomás aseguró que desconoce si Camps pagó los trajes pero recordó que en ningún caso los pagó personalmente en la tienda, sino que Pablo Crespo era el encargado de correr con estos gastos.
ELPLURAL.COM
La implicación de Francisco Camps en la trama de corrupción de la Operación Gürtel ha sido, sin duda, una de las que más ha molestado al PP, cuya dirección nacional no deja de buscar argumentos para avalar su inocencia. El peor parado ha sido, quizás, José Tomás, el director de ventas primero de Milano y luego de Forever Young, las tiendas donde supuestamente las empresas de la trama de Francisco Correa habrían pagado los trajes para el president. Federico Trillo ha acusado al sastre, que perdió su trabajo dos días después de declarar ante Garzón, de mentir y ha dudado de su cualidad profesional. Sin embargo, las pruebas que obran en poder del magistrado dejan clara la vinculación de Camps con las empresas imputadas en el caso.
Grabaciones, pinchazos telefónicos, facturas y las declaraciones del sastre José Tomás son las pruebas que maneja el juez Baltasar Garzón y que demuestran las vinculaciones del presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, con las empresas de Francisco Correa, el principal imputado en la Operación Gürtel. El diario El País recuerda en su edición de hoy como, pese al empeño que los populares están poniendo para restar importancia a la implicación del jefe del PP valenciano -incluso han llegado a denunciar al sastre José Tomás-, Camps cerró contratos con las empresas de la trama y su nombre aparece en diversas declaraciones de personas citadas por el juez.
Pruebas que implican a Camps
Buscando salvaguardar la inocencia del dirigente valenciano, Federico Trillo, responsable de Justicia del PP, arremetió contra José Tomás, el encargado de ventas de Milano y Forever Young, las firmas en las que las empresas de Correa habría comprado los trajes para Camps. Trillo, que negó que conociera al sastre, advirtió que éste miente sobre sus relaciones con el president, sin embargo, hay numerosas pruebas que demuestran lo contrario.
Grabaciones telefónicas
Al margen de las grabaciones telefónicas en las que una de las subordinadas de Correa, Isabel Jordán, aseguraba haber pagado personalmente una factura de 30.000 euros en trajes para Camps (una afirmación que la investigación apuntó como basada en datos reales), otro de los imputados en el caso, Álvaro Pérez El Bigotes, dejó claro a través de los pinchazos telefónicos que ha investigado Garzón que hacía gestiones, algunas de ellas privadas, para el presidente valenciano y también para su número dos, Ricardo Costa.
Facturas
Por otra parte, Garzón tiene en su poder documentos de empresas vinculadas a la trama y de las mencionadas tiendas de moda que dan una visión de los pagos efectuados. Existen, por un lado, pagos por parte de Orange Market (la filial valenciana de la trama) en Milano en 2006 de vestuario para Camps. También hay pagos en Forever Young de ropa del president y de otros cargos vinculados con la trama como Pablo Crespo, Álvaro Pérez, Ricardo Costa, Pedro García y Rafael Betoret.
Pedidos para Camps
Estos últimos pagos, que oscilan entre los 3.200 y los 6.700 euros por persona, fueron abonados por transferencias bancarias y cheques procedentes de Servimadrid y Diseño Asimétrico, ambas dependientes del conglomerado de empresas de Correa. Entre las facturas, de los meses de junio y julio de 2007, figuran algunas notas de pedidos a favor del propio Camps.
El sastre confirmó las compras
Además, Tomás explicó ante el juez, y después lo ha hecho en varias ocasiones en la prensa, cómo Camps fue el destinatario de compras en 2008 pagadas por Orange Market mediante transferencias o incluso en efectivo. En declaraciones a la prensa, Tomás aseguró que desconoce si Camps pagó los trajes pero recordó que en ningún caso los pagó personalmente en la tienda, sino que Pablo Crespo era el encargado de correr con estos gastos.
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