Joan Martorell declara ante el juez
* El ex director general de Comunicación niega un trato de favor a Alemany
* 'Los medios que optaban a ayudas pasaban concurso antes de que Matas lo supiese'
* El ex director general de Comunicación niega un trato de favor a Alemany
* 'Los medios que optaban a ayudas pasaban concurso antes de que Matas lo supiese'
Europa Press | Palma
El director general de Comunicación en la pasada legislatura del PP, Joan Martorell, ha afirmado en calidad de imputado ante el juez instructor del caso Palma Arena que el ex presidente del Govern, Jaume Matas, no sólo mostraba interés por la concesión de subvenciones públicas a quien fuera asesor externo del ex jefe del Ejecutivo balear, el periodista Antonio Alemany, sino también a otros medios de comunicación de Baleares y en especial a los principales diarios de las islas.
Así lo ha puesto de manifiesto durante la declaración que ha prestado de forma voluntaria en el marco de una pieza del caso Palma Arena ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, José Castro, solicitada a fin de aclarar varios puntos de la comparecencia efectuada hace un mes por el director de la agencia de publicidad Nimbus, Miquel Romero, también encausado en este procedimiento, según han informado fuentes jurídicas a Europa Press.
Tal y como ha puesto de manifiesto Martorell, Matas era muy sensible al otorgamiento de ayudas para la prensa en general y en este sentido ha explicado que, una vez había sido para ello convocado un concurso público, evaluados los distintos proyectos y formalizado el expediente para destinar los fondos a un determinado medio, Martorell despachaba con el ex presidente para informarle de cuál debía obtener la subvención a razón de los resultados de la convocatoria.
De este modo es como ha defendido que la elección pasaba por concurso antes de que Matas fuera informado -y no al revés-, en respuesta a las preguntas formuladas por la Abogacía de la Comunidad Autónoma, centradas en averiguar si desde el Govern se pretendía dar un trato de favor a Alemany, una de cuyas empresas, la Agencia Balear de Noticias (ABN), está siendo investigada por las presuntas irregularidades cometidas en el proceso de subvención de este medio durante la pasada legislatura.
Precisamente, sobre este extremo el propio Alemany ya defendió ante el juez la tramitación de una subvención que percibió ABN y que según certificó el grupo de delincuencia económica de la Policía Nacional fue de 270.000 euros, aseverando que sin ella "el proyecto para la gestión de ABN hubiera sido inviable". Sin embargo, el magistrado rechazó una petición del periodista de abrir una investigación sobre los concursos de subvención a medios convocados por los distintos gobiernos autonómicos entre 2002 y 2008 para evitar "entorpecer y dilapidar" las pesquisas.
Así lo ha puesto de manifiesto durante la declaración que ha prestado de forma voluntaria en el marco de una pieza del caso Palma Arena ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, José Castro, solicitada a fin de aclarar varios puntos de la comparecencia efectuada hace un mes por el director de la agencia de publicidad Nimbus, Miquel Romero, también encausado en este procedimiento, según han informado fuentes jurídicas a Europa Press.
Tal y como ha puesto de manifiesto Martorell, Matas era muy sensible al otorgamiento de ayudas para la prensa en general y en este sentido ha explicado que, una vez había sido para ello convocado un concurso público, evaluados los distintos proyectos y formalizado el expediente para destinar los fondos a un determinado medio, Martorell despachaba con el ex presidente para informarle de cuál debía obtener la subvención a razón de los resultados de la convocatoria.
De este modo es como ha defendido que la elección pasaba por concurso antes de que Matas fuera informado -y no al revés-, en respuesta a las preguntas formuladas por la Abogacía de la Comunidad Autónoma, centradas en averiguar si desde el Govern se pretendía dar un trato de favor a Alemany, una de cuyas empresas, la Agencia Balear de Noticias (ABN), está siendo investigada por las presuntas irregularidades cometidas en el proceso de subvención de este medio durante la pasada legislatura.
Precisamente, sobre este extremo el propio Alemany ya defendió ante el juez la tramitación de una subvención que percibió ABN y que según certificó el grupo de delincuencia económica de la Policía Nacional fue de 270.000 euros, aseverando que sin ella "el proyecto para la gestión de ABN hubiera sido inviable". Sin embargo, el magistrado rechazó una petición del periodista de abrir una investigación sobre los concursos de subvención a medios convocados por los distintos gobiernos autonómicos entre 2002 y 2008 para evitar "entorpecer y dilapidar" las pesquisas.
Niega haberse reunido con Romero para recomendarle a Alemany
Por otro lado, Martorell, que ha depuesto por espacio de unas dos horas, ha desmentido que, en contra de lo que había dicho Romero, se reuniese con éste para recomendarle la contratación de Alemany una vez había sido adjudicado a Nimbus un proyecto de asesoramiento y elaboración de discursos, lo que los investigadores consideran que sirvió para simular la contratación directa y amañada del periodista por parte del Ejecutivo autonómico.
Así, ha aseverado que la mayor parte de la gestión de este concurso no fue suya sino que las instrucciones partían principalmente del gabinete de Presidencia del Govern. Y en este sentido, ha apuntado hacia la entonces jefa de gabinete de Matas, Maria Umbert. No obstante, ha asegurado desconocer si el ex presidente medió para que Alemany fuese subcontratado por la agencia de publicidad, que según las investigaciones sirvió de intermediaria en una presunta financiación ilegal del PP.
Mientras tanto, también ha sido inquirido por la concesión de un contrato menor que percibió Alemany por valor de 12.000 euros para promocionar el deporte balear en distintos medios deportivos de ámbito nacional, sobre lo cual ha recordado que autorizó este pago aunque ha reconocido que no verificó si finalmente el proyecto se llevó a cabo. Las pesquisas apuntan a que este trabajo no fue justificado, aunque la defensa del periodista ha solicitado que se lleven a cabo las gestiones pertinentes para su localización.
elmundo.es
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